La Cámara de Diputados aprobó finalmente esta semana por unanimidad un proyecto sobre el que probablemente se ha discutido y reflexionado muy poco: la devolución anticipada de aportes a las Administradoras de Fondos de Pensión (AFP).
Aunque el proyecto de ley se encuentra ahora en la Cámara de Senadores, se espera que finalmente sea aprobado sin modificaciones en los próximos días.
La idea de que se devolvieran los aportes fue planteada en distintos ámbitos y desde la llegada de la pandemia al país a inicios de 2020, y se basó en propuestas similares observadas en países como Chile o Perú.
Sin embargo, a pesar de que se advirtió en más de una oportunidad de los riesgos de poner en práctica cualquiera de las propuestas que fueron surgiendo en el último año y medio, pronto será una realidad.
Por ejemplo, los proyectos de retiros anticipados de aportes a sus respectivos sistemas de AFP en Chile o Perú, tienen larga data, no surgen a raíz de la pandemia, y en realidad constituyen un ataque de los movimientos políticos de extrema izquierda que han ido ganando poder en estos países.
Se trata de una estrategia para atacar lo que mejor se entiende como la piedra angular del modelo económico liberal diseñado por los Chicago Boys (un grupo de economistas chilenos, la mayoría formados en el Departamento de Economía de la Universidad de Chicago), que explica el incuestionable éxito económico posterior de Chile a ser imitado no sólo en la región, sino en el mundo.
Aún así, el proyecto de Ley N° 078/2020-2021 que se ha presentado en Bolivia establece que, “de manera excepcional y por única vez”, la devolución de aportes previsionales del sistema de AFP tendrá el siguiente orden:
-Podrán hacer retiros solo quienes hayan aportado y estén desempleados.
-Quienes hayan acumulado hasta Bs. 100.000 en aportes podrán retirar hasta un 15% de los mismos.
-Quienes hayan acumulado más de Bs. 100.000 en aportes podrán retirar solamente Bs. 15.000
Además, así como muy bien ha apuntado Kathya Vaca Díez, economista experta en pensiones, “es muy importante también cuidar la estabilidad que ha gozado el sistema financiero en las últimas décadas”.
Vaca Díez explica que “el 60% de los 20.000 millones de dólares de ahorro de los fondos de pensiones se encuentra invertido en depósitos a plazo fijo de entidades financieras, lo que ha permitido créditos a largo plazo y a bajas tasas de interés. Esta desinversión, sumada al diferimiento y periodo de gracia de los préstamos en la pandemia, pudiera comprometer la liquidez del sistema. Asimismo, la inversión se puede ver afectada y por lo tanto, el empleo; ya que los fondos de pensiones también financian directamente la producción a través de la inversión en bonos de empresas”.
Ahora mismo, y así como también apunta Agustín Zambrana, abogado y periodista, el sistema financiero nacional está muy cerca de encontrarse en serios problemas de falta de liquidez.
Concretamente, Zambrana ha dicho que “la liquidez del sistema financiero está a niveles similares a los registrados a finales del año 2020. La cartera de créditos prácticamente no ha crecido y las reprogramaciones, sumadas a la morosidad, se acercan a los Bs. 35.000 millones, cifra que equivale a dos veces el patrimonio del sistema bancario”.
Y aclara que además de que “las AFP requieren aproximadamente de Bs 3.900 millones para devolver parte de los recursos previsionales, una vez que se apruebe la ley”, ahora mismo el gobierno central está gestionando una ley para obtener un financiamiento del Banco Central de Bolivia por Bs. 15.000 millones, entre otros, para concluir la presente gestión 2021”.
Es decir, la crisis económica del sector real de la economía va a terminar afectando al sistema bancario y financiero en el corto plazo. Por tanto, la devolución anticipada de aportes a las AFP no es recomendable, mucho menos en las circunstancias actuales.
Con esta oposición, ¿quién necesita cuidarse del oficialismo?
Peor aún, y a pesar de las numerosas advertencias de distintos entendidos sobre este proyecto de ley, Comunidad Ciudadana (CC) recientemente presentó al gobierno una propuesta de cuatro medidas económicas para encarar la crisis, entre las que, justamente, se encuentra el retiro anticipado de aportes a las AFP, y que explican la aprobación de la ley por unanimidad.
Sobre estas propuestas, Carlos Mesa (líder de CC) ha afirmado: “no estamos planteando una línea opositora al gobierno en términos económicos, por una razón básica: porque nos va la vida a todos, porque seríamos suicidas de celebrar el fracaso y colapso económico (del modelo) propugnado por el gobierno. Queremos ayudar al gobierno, porque queremos ayudar al país, pero la respuesta sistemática es ‘No’”.
Lo que esto demuestra, sin lugar a dudas, es que Carlos Mesa y CC están, en realidad, perfectamente alineados en cuanto a lo que suponen que se requiere para encarar la crisis económica, y si acaso mantienen diferencias son mínimas.
Miguel Roca, diputado por CC, ha aclarado que la diferencia de su propuesta de devolución de aportes con la del Movimiento al Socialismo (MAS) está en que la devolución debería tener mayor alcance.
Ante la aprobación del proyecto ante los diputados, el ministro de Economía y Finanzas Públicas, Marcelo Montenegro, recomendó a los aportantes no retirar sus aportes de las AFP, afirmando lo siguiente: “cuando sacamos estos recursos estamos atentando a nuestra propia jubilación. En la medida que no sea estrictamente necesario sacar estos recursos, yo recomendaría que no los saquen”.
Pero tampoco es que Montenegro haya tenido arranque de sensatez alguno. Su postura podría estar relacionada con el hecho de que todo lo que las AFP no devuelvan con esta ley, constituirá una de las pocas fuentes de financiamiento del gasto público que le quedarán al régimen de Arce.
Lo que no advierten ni CC ni el MAS, es que el problema no están en el destino de los aportes, sino en el sólo hecho de plantear la devolución de los mismos, porque constituye una amenaza para la estabilidad del sistema financiero nacional en el corto plazo.
Columna originalmente publicada en La Gaceta de la Iberosfera, el 22 de agosto de 2021.